Entre las normas ASTM, la D 1556 es una que no debe ignorarse ya que se trata del método de ensayo estándar para determinar la densidad del suelo in situ, mediante el método de cono de arena. De manera que el ensayo STM D 1556 se limita por lo general a un suelo en una condición no saturada.
Las condiciones y fines del ensayo ASTM D 1556 no permiten que sea recomendable para los suelos que son fáciles de pulverizar y que por lo tanto se consideran suelos blandos. Tampoco es recomendable para los suelos que se encuentran en una condición de humedad de manera que el agua se escurra en un hueco cavado a mano.
La razón por la que no se recomienda para tales condiciones de suelos es porque la precisión del ensayo es afectada por los suelos que se inclinan a deformaciones fácilmente o por los suelos que sufran cambios volumétricos en el huevo excavado a raíz de que el personal se detenga cerca del hueco durante la prueba. Por lo tanto hay que resaltar que el suelo debe estar en una condición no saturada para garantizar la precisión de los resultados del ensayo.
El método que resulta en el Ensayo ASTM D 1556 es ideal para determinar la densidad de un suelo compactado, y es utilizado en la construcción de terraplenes de tierra, también en las estructuras de rellenos y en rellenos de carretera. Para los suelos compactados a una densidad específica o a un porcentaje máximo de densidad el ensayo es utilizado como base de aceptación.
De manera que cualquier suelo o cualquier tipo de material que pueda excavarse con herramientas de mano, también puede ser ensayado con este método. Para ello es necesario que el material ensayado posea la suficiente cohesión o atracción entre partículas de manera que así pueda mantener estable los lados de un hueco pequeño o de una excavación.
Los materiales para el ensayo deberán además ser suficientemente firmes para así soportar las presiones que se ejercen al excavar el hueco y colocar el aparato para el ensayo sobre el mismo, de manera que no se deforme el material ni se desplace.
